CRONICA IRONMAN HAWAII

UN SUEÑO HECHO REALIDAD. - Después de tener tiempo de pensar, de digerir todo lo que he hemos vivido y tener las mejores sensaciones del mundo, por fin puedo escribir la crónica del mejor triatlón que he corrido. Los días previos son una autentica pasada, lo que cuente se queda en nada porque realmente es alucinante. El viaje un coñazo porque son muchísimas horas de vuelo, controles y más controles, sobre todo en Estados unidos. Mi hijo Daniel se porto genial ya que la gran mayoría del viaje estuvo durmiendo. La verdad es que entre el cansancio y la ilusión con la que íbamos el viaje se me hizo ameno y además estaba acompañado de Alberto Codinach, su novia Ainoa y de Carlos Pomar y de su mujer María, que se portaron genial con nosotros.

El primer día al ver el Pier llore de felicidad, estaba en el lugar de mis sueños donde tantas y tantas veces me había imaginado estar. Andar por allí y cruzarte a la elite mundial saludarlos y que ellos te devuelvan el saludo, como si te conocieran. La verdad me había imaginado miles de veces ese lugar y de cómo seria, pero no tiene nada que ver con lo que pudiéramos llegar a pensar o soñar, aquello es el paraíso para un triatleta. No importa si eres bueno o malo, si eres conocido o no, lo único que importa es que eres Triatleta.

SWIM. - No me suena el despertador, lo había puesto en PM en vez de AM, raro muy raro en mi. Por suerte me despierto a las 4:15, empiezo a coger todo y a despertar a la gente, desayuno lo de siempre antes de un IM, anoche no cene mucho un par de trozos de pizza (tal vez hay estuvo el error). Nos montamos en el coche, vamos donde había que dado con Carlos y Alberto. Llegamos a la cuesta de Palani, y aparcamos, si no es por Alberto estaríamos perdidos (el estuvo el año pasado aquí y se sabe todos los truquillos). Nos hacemos la foto de rigor con la hinchada alcarreña y albaceteña, nos dirigimos a la zona de marcaje, hay me despido de Araceli y de Daniel, pensando que ya no podría verlos.

En el marcaje te sientes importante, el ritual de ponerte el dorsal alucinante te lo colocan perfecto. Cuantas veces abre visto esta parte del video y ahora soy yo el que está aquí, después nos pesan, no se por qué supongo que será tema medico o de estudio (pese 159 libras, quizás un par de kilos por encima de mi peso ideal). En todo momento voy con Alberto y Carlos, no me separo de ellos, Alberto nos hace de guía solo le falta el altavoz para decirnos donde están las cosas para ser un guía profesional. El ambiente en boxes es indescriptible, una marea de bicicletas se confunden con el océano Pacifico. Coloco todo en la bici, pero hoy no lo coloco minuciosamente no se por qué hoy estoy distraído con todo, Alberto y yo buscamos a Carlos que no esta en su bici, salimos para despedirnos de la familia, le doy un beso a Araceli y otro a Daniel, un abrazo al Mister y foto con el dorsal marcado a fuego en el brazo.

Me dirijo al pier y dan la salida de los pros, no nos dejan bajar hasta que han pasado unos 5 minutos de su salida. Vemos a los de triatlón channel, y nos graban un poco. Bajo a la playa donde estamos todos los españoles, la gente se tira al agua para coger buen sitio, yo espero pacientemente en la orilla hasta que faltan 5 minutos. Suena el himno americano, bailes hawaianos, esto es el Olimpo. Me tiro al agua buscando la parte izquierda de la salida donde supuestamente me llevaría menos golpes. Llego a la altura del coche flotante y hay mucha gente en el, no hay sitio donde agarrarme (recuerdo lo que me dijo José Luis un día que fuimos a escalar –siempre hay un sito donde agarrarse) con la yema de los dedos me agarro como puedo. Hablo con mi tío le doy las gracias por estar conmigo, mi mujer e hijo están en el pier, hoy es mi cumpleaños, estoy en el mejor sitio del mundo, y voy a correr mi primer campeonato del mundo de Ironman. Se puede pedir mas?

De pronto POMMMMMM!!!!! Dios tiembla hasta el agua. Grito de guerra MANTECAOOOOOO!!!! Me santiguo y a nadar. Jajajajajajajaj a nadar digo, no podía. En mi vida he tenido miedo por mi vida, pero en la salida lo tuve, gente por debajo de mi, gente por encima y venga a tragar agua y más agua. Tuve que quitármelos de encima como pude. 500 metros agonizando, hasta que de pronto puedo nadar como yo quiero, voy pegándome poco a poco a las boyas, pero me siguen dando golpes y abro los codos para apartármelos. Voy viendo el catamarán más cerca y cojo los pies de una chica, la gente vuelve a darse de ostias en el catamarán y yo como puedo salgo airoso. Ya de vuelta voy con buenas sensaciones, con ganas de seguir nadando, el fondo se ve claramente el agua es súper cristalina. De repente me parece ver un mono del Guadalajara me arrimo a él y es Carlos que se da cuenta y me da un par de palmadas en la espalda, me coloco a sus pies se que nada mejor que yo y sabe leer mejor que yo la carrera. No han pasado ni 100 metros y veo a Alberto con nosotros, me digo con ellos hasta el final, nadan mejor y saben lo que se hacen. A la mitad del retorno lo paso mal Alberto a puesto un ritmo muy fuerte para mi, me digo venga venga con ellos. Entrando en el Pier se que lo tengo echo así que disfruto aun que voy jodido. Pongo un pie en la arena y nos felicitamos Alberto, Carlos y yo. Tiempo 01:02:35, 69 de mi grupo de edad, 366 de la general. T1 Contento por cómo había nadado, no me lo creía. Había hecho mejor tiempo que en Roth y eso que allí nade con neopreno. Salgo súper animado, cojo la bolsa y me quito el mono del club, me pongo el tri top y tardo mucho en ponérmelo, salgo de la carpa con la bolsa y a la altura de la bicicleta me doy cuenta que la llevo encima. Se la tiro a los voluntarios y corro por la alfombra, Tiempo 5:12, súper lenta.